Palabras del PRESIDENTE VICENTE FOX QUESADA durante la ceremonia de Donación de 20 mil Sillas de Ruedas, que tuvo lugar en el Salón Adolfo López Mateos, de la Residencia Oficial de Los Pinos.
Bien, jóvenes, bienvenidas, bienvenidos a esta su casa Los Pinos, casa de todas y de todos los mexicanos.
Hoy recibo con mucho cariño, con amor, con admiración a quienes hacen el favor de visitarnos, a quienes son un verdadero ejemplo de coraje, de fortaleza, un verdadero ejemplo de vida, que mucho nos inspira a todos los demás.
Bienvenidas y bienvenidos a esta su casa.
La satisfacción de dar, de ser para los demás no tiene límite, eso nos enriquece a quien da, a quien recibe.
Amigas y amigos:
En seis años, Kenneth y Ken han cambiado la vida de más de medio millón de personas, a través de la Fundación Wheelchair.
Esta es una prueba más de que la generosidad es una fuerza que transforma al mundo.
Como respuesta a una gestión del Instituto Nacional de las Personas Adultas Mayores, en abril pasado, estas dos personas, filántropos, nos visitaron aquí en Los Pinos, en esta casa de todos los mexicanos, para expresarnos su compromiso de aportar dos millones de dólares para la compra de sillas de ruedas y nos expresaron que una vez distribuidas éstas, va a haber más.
Este muy importante donativo forma parte de una campaña a la que significativamente llamaron: Movilidad y Amistad para México.
Hoy que comenzamos a distribuir esas sillas en todo el país quiero manifestar nuevamente en nombre del Gobierno y del pueblo de México nuestro reconocimiento para ambos.
Como bien dijo Benjamín Franklin: un hermano puede no ser amigo, pero un amigo siempre será un hermano.
Tenemos el gusto de que hoy nos acompañen Kenneth y en representación del señor Hoffman, Denis Constanza, sean muy bien bienvenidos y les pido que hagan llegar el agradecimiento de las familias mexicanas a sus generosos benefactores.
Todos hemos escuchado lo que significan esas sillas para José Francisco, para Carmen.
Esta actitud de optimismo se multiplicará ahora por 20 mil veces, generando una gran corriente de vitalidad y confianza.
Desde aquí le envío un caluroso abrazo a todos quienes van a recibir estas sillas y a sus familias.
En el México democrático crece y se fortalece la participación ciudadana.
A la generosidad de Kenneth y Ken se ha sumado el trabajo de la Fundación TELMEX, de quien constantemente oímos su filantropía, su deseo de apoyar las mejores causas de nuestro país.
Y no podemos olvidar al Club Rotario Internacional que, como siempre, trata de servir a los demás.
Y mi reconocimiento a muchas organizaciones de la sociedad civil que trabajan por estas buenas causas.
Ese trabajo nos muestra que la participación de la sociedad y de los ciudadanos se ha convertido en un valor fundamental de nuestra democracia, en un verdadero apoyo al Gobierno y su tarea.
Ustedes han asumido su responsabilidad social, han hecho la parte que les toca para convertir en realidad el sueño de muchas personas.
También hoy se demuestra que cuando se trabaja en equipo, cuando actuamos unidos atrás de una causa podemos hacer mucho más, podemos enfrentar cualquier reto en beneficio de los demás, podemos acelerar la construcción del bien común en nuestro país.
Yo estoy seguro de que vamos a seguir trabajando juntos para que todos, todos, adultos mayores, jóvenes, niños, mujeres, chiquillos, chiquillas con problema de movilidad cuenten, a la brevedad, con una silla que los ayude a integrarse mejor a la vida cotidiana.
Juntos, sociedad y Gobierno, vamos a encarar con éxito este reto.
El señor Hoffman ya ha ofrecido aportar adicionalmente una cantidad similar a la que se genere con donativos de instituciones mexicanas.
Así que aquí tenemos un reto todos, que bien podemos enfrentar y llegar tan lejos como asegurar que cada persona que en este país requiera, necesite de esa movilidad pueda tener acceso a ella.
Una sociedad democrática es incluyente y combate la discriminación, ofrece oportunidades; por eso, durante este Gobierno, los mexicanos hemos venido trabajando para incorporar a las personas con alguna discapacidad.
Hemos promovido la accesibilidad en los inmuebles, edificios, instalaciones del Gobierno Federal, comenzamos por esta casa, por Los Pinos.
De modo que estamos listos para recibir a las personas con problemas de movilidad en los edificios públicos y aquí.
También avanzamos en la realización de adecuaciones en la infraestructura del transporte aéreo y de transporte terrestre; además tenemos ya el Proyecto de la Norma Mexicana de Accesibilidad a los Espacios Públicos.
Este proyecto es la base para reglamentar la construcción de elementos como rampas, barandales, señalización en todos los edificios públicos del país.
Hemos lanzado con mucho éxito el Programa de Empresas Incluyentes, que no sólo den acceso a la movilidad, sino que den empleo, como ya lo están haciendo en muchas de estas fábricas e instalaciones comerciales.
Y la Oficina para Atender y Promover el Apoyo a las Personas con Discapacidad ha estado muy activa durante estos años, trabajando en distintos frentes, junto con las personas con capacidades diferentes que mucho nos enseñan y de quienes mucho aprendemos todos los días.
Estos avances se derivan del nuevo marco jurídico, creado por la Ley General de las Personas con Discapacidad, con el fin de promover la equidad, la accesibilidad, la integración, el respeto, el reconocimiento a las diferencias y los consecuentes apoyos presupuestales, ahora es una ley en nuestro país.
Amigas y amigos:
No hay democracia sin participación y solidaridad, participación y corresponsabilidad son esenciales para nuestra democracia, participación y corresponsabilidad fortalecen a México y sus ciudadanos; unidad y cumplimiento con la ley son esenciales para la consolidación de nuestra democracia y fortalecimiento de nuestras instituciones.
Así en democracia, todas y todos los mexicanos tienen derecho a integrarse plenamente a la sociedad, tienen derecho a la salud, a la educación, a contar con un empleo y con una vivienda digna.
Invito a todos aquí presentes, a todas y a todo el país a fortalecer la participación ciudadana, a asumir responsabilidades, a apoyar y ser para los demás, así ampliamos la cultura solidaria y promovemos juntos la equidad.
Redoblemos el esfuerzo de sociedad y Gobierno para poner al alcance de toda la gente con capacidades diferentes más sillas de ruedas, más apoyos que les permitan integrarse plenamente a la familia, más empleos, más apertura y acceso a las escuelas, al conocimiento, al trabajo, al deporte.
Continuemos impulsando una sociedad más humana, más solidaria dispuesta a dar y no sólo a recibir.
Sigamos construyendo juntos una cultura de la generosidad y de la protección y apoyo a los más necesitados.
Es bueno dar cuando nos piden, es mejor si la comprensión se anticipa a la solicitud de ayuda.
Como ha dicho Kenneth: cuando veo la felicidad en los ojos de la persona que recibe una silla de ruedas, siento que es lo más grande que he logrado en mi vida.
Muchas gracias nuevamente a todos por participar en la construcción de un México más democrático y justo, más igualitario e incluyente.
Estoy seguro de que las familias no olvidarán a quienes hoy han hecho posible una vida mejor para sus seres queridos, a quienes hoy demuestran una vez más que la solidaridad y la generosidad nos hermana y nos acerca, nos hace más humanos.
En efecto, la fraternidad nos lleva a reconocer y a valorar en los otros nuestra propia humanidad.
A ustedes muchas felicidades, a ustedes muchas gracias y que Dios bendiga a todas y a todos.